Cumpliendo años entre Salamanca y Sevilla

Ayer, 27 de octubre, fue mi cumpleaños. Cumplí 55 años. Sí, soy del 67. Y fue un día de cumpleaños intenso porque afortunadamente pude hacer bastantes cosas. Un día que empecé en Salamanca junto a mi Merchi y toda la gente que me atiende por allí y que terminamos junto a nuestra familia asistiendo a la X Gala de Premios Blogosur en el Nissan Cartuja, a la que nos invitaron. Pero empecemos por el principio…

Esta semana tocaba un nuevo #SalamancaOnTour. Teníamos que acabar el ciclo 20 del tratamiento de este ensayo clínico que tan bien me está viniendo, el C20D15. Tuve de acompañante de nuevo a mi Merchi y nos llevó de Sevilla a Salamanca Jesús, otro taxista de Teletaxi que ya nos había llevado en alguna que otra ocasión. Buena gente y viaje agradable. Gracias, Jesús.

Llegamos al Hospital de Salamanca un poco después de las dos y media, nos dirigimos a la zona de Ensayos clínicos, donde saludamos a nuestras enfermeras cracks, me pesé -85,2 kg-, me tomaron las contantes y me hicieron la extracción de sangre para la analítica, lo habitual en cada visita. Como todo estaba bien, me dieron permiso para irme. Pero antes pudimos saludar a Jose y a Mónica, de Granada pues, aunque estaban ingresados para empezar un nuevo ensayo, estaban allí esperando que le infundieran plaquetas a él. Le deseamos que todo les fuera bien y les mandamos ánimos. Llamamos al taxi, nos recogió Matías y, antes de encerrarnos en el hotel, comimos algo y dimos un paseo -pequeño, porque todavía no puedo andar mucho- por el entorno de la Plaza Mayor, que tanto nos gusta. Compramos unos bocadillos de jamón y de caña de lomo que nos comeríamos para cenar -la mitad para cada uno- y nos fuimos al hotel para descansar del viaje. Allí nos recibió María José con su simpatía habitual y nos asignó la habitación de siempre, la 007.

A partir de las doce de la noche empezaba mi cumpleaños y os aseguro que tuve que silenciar el móvil por la cantidad de mensajes recibidos. Por WhatsApp, por Twitter, por Facebook, por Instagram… Ya por la mañana alguna que otra llamada telefónica -mi amigo Jesús nunca falla-. Eso sí, por segundo año consecutivo no he recibido ningún SMS… jejeje. Sin exagerar… cientos de mensajes de felicitación recibidos. ¿Es para sentirse querido o no? Mil gracias a todos, esto sí que da fuerzas para seguir…

Permitidme que destaque este mensaje de felicitación de mi hija Patri:

Me tuve que secar las lágrimas de la cara por la emoción varias veces durante el día. Esta vez fue la primera de ellas.

Por la mañana nos despedimos de Rocío, que estaba en la Recepción del hotel, nos recogió allí Juan Carlos y nos acercó al hospital. Sabía que mi hematóloga Mariví no estaría en consulta pues me lo dijo en la última visita. Fue David quien me atendió, me preguntó cómo estaba, le dije que bien salvo el tema de los picores, los problemas de la piel y la falta de apetito. Pero, como siempre digo, cosas controlables y efectos secundarios mínimos. Los firmo mientras siga escuchando como le escuché decir ayer a David que vamos bien, que la enfermedad sigue controlada. Así que es para seguir contentos…

Me fui a una cama a esperar a que llegara el tratamiento de Farmacia -ayer solo tocaba el chute de Talquetamab- y mi Merchi se sentó a mi lado. Momento en el que aprovechamos para dar buena cuenta de una caja de piononos que llevamos Merchi y yo para celebrar mi cumple y que compramos en la pastelería «La Ysla» de Granada el pasado fin de semana. Hasta nos quedamos cortos. La próxima vez llevaremos dos cajas. Por allí estaban mis enfermeras cracks y estudiantes en prácticas. También vinieron a felicitarme Bea -otra de mis hematólogas-, Irene -la coordinadora de mi ensayo actual- y Elena -la coordinadora de mi ensayo anterior-.

Llegó pronto mi tratamiento, me lo pusieron y, como todo estaba bien, nos dieron permiso para volver a casa. Nos recogió Matías y llegamos a Sevilla poco antes de las cuatro de la tarde. Durante el camino pudimos escuchar dos de los últimos programas de «La voz de los imparables».

Y al llegar a casa… esto:

Y tras soplar las velas de la tarta que mis niñas y mi yerno me habían preparado, nos comimos un cachito de tarta cada uno y descansamos un ratito porque por la noche íbamos a asistir a la «X Gala Blogosur», de entrega de premios a los mejores de la red y de sus aplicaciones de ámbito andaluz. Todavía me acuerdo de lo vivido en la novena gala celebrada en febrero de 2020 -un mes antes de que llegara la pandemia-, en la que me entregaron el «Premio #yomecuro» y que conté por aquí.

En total para esta décima gala me dieron dieciséis invitaciones, que aprovechamos entre mi familia y la familia de mi mujer. Ahí estamos:

Fue una gala entretenida, presentada por Fernando Garcia Haldón y los alumnos de la Escuela de Reporteros de Andalucía. Pude saludar a bastante gente conocida y a otra que conocí personalmente en ese momento, pero la foto con la ganadora a la mejor cuenta de Instagram me la tenía que hacer, la @abueladedragones:

Aquí está la gala completa por si la quieres ver:

Gracias al amigo Pepe Santos por la invitación y a la gente de Blogosur por lo bien que lo hicieron. Me encantó saludar al amigo Miguel Ángel Moreno y desvirtualizar a José Luis Paneque, de Canal Sur y a Manu Ordóñez, director de «Enredados», que me lo presentó mi amigo y vecino Jesús, realizador del programa. Estaban todos los chicos de Enredados, que recibieron el premio al mejor perfil de servicio público de Andalucía. Enhorabuena por difundir el buen uso de las redes sociales en una televisión pública en un programa dirigido a un público joven. Aquí está mi sobrina Ángela con ellos:

Podemos decir que ha sido un magnífico día de cumpleaños… y eso que he tenido que recibir un tratamiento y hacer un viaje de 480 kilómetros. Pero son tantas las cosas bonitas vividas… que me quedo con ellas. La cantidad de felicitaciones recibidas, la atención tan exquisita que me prestan cada vez que voy a Salamanca, el que mi Merchi esté siempre a mi lado, el que mis hijas y mi yerno me hayan recibido como me han recibido… y el haber podido disfrutar de la X Gala Blogosur junto a mi familia. No se puede pedir más. Acabé muy cansado. Es comprensible, ¿verdad? Pero hay que seguir viviendo…

Hasta el Sevilla FC me felicitó mandándome este gif por correo electrónico: